Stop and go!

Eso es lo que hay que hacer cuando todo se empieza a salir de control y no se vé manera de ordenar lo poco que debería estar ordenado. O cuando la condensación cerebral sólo permite continuar repitiendo una y otra vez las mismas ideas. O cuando, por alguna extraña razón, por la aguda vista externa, se cambia todo un discurso que se está trabajando, y se propone una forma de trabajo sobre una posición contigente. Pues nada. Creo que tengo que hacer esto: Stop and go! Una pequeña parada.